¿Qué es la terapia ocupacional?
La terapia ocupacional (TO) es una disciplina que nació hace relativamente poco: en el último año de la I Guerra Mundial. Debido al impacto de la guerra en soldados y población civil. Desde entonces, se ha ido transformando hasta configurarse en la profesión sociosanitaria actual.
Parafraseando la definición de la OMS, se trata de todo un conjunto de metodologías, técnicas y actividades enfocadas a mantener o restaurar la salud de las personas. En este sentido, entre sus objetivos principales está conseguir recuperar las funciones perdidas por los pacientes para que puedan tener una vida lo más independiente posible.
Estas funciones comprenden no sólo las físicas, como motrices, sino también las emocionales, las psíquicas, las sociales, las laborales y las cognitivas. Se ocupa de todos los aspectos de una persona.
¿Qué hace un terapeuta ocupacional?
Estos profesionales de la terapia ocupacional trabajan con personas que tienen algún tipo de problema o déficit físico, social, psicológico, cognitivo o emocional. Su objetivo es optimizar la independencia de los pacientes. De este modo, trabajan con ellos para mejorar su calidad de vida.
Los ámbitos en los que trabajan son muchos y variados. Tienen que ver con todo lo que ocupa a las personas, de ahí «ocupacional». Por ejemplo, trabajan con personas que han sufrido algún accidente, con personas mayores o con quienes tienen discapacidades psíquicas.
Se ocupan de muchos tipos de rehabilitaciones, como neurológicas, pediátricas o geriátricas. También actúan en entornos escolares ayudando en la adaptación e integración de estudiantes con carencias cognitivas o sociales. Trabajan además con personas drogodependientes.
Cómo formarte para convertirte en un profesional
Los terapeutas ocupacionales tienen una formación muy especializada. Deben tener conocimientos sobre rehabilitación, psicología y mediación social, entre otros.
Para poder ejercer esta profesión es necesario cursar el Grado en Terapia Ocupacional. La formación que reciben los terapeutas consta de tres partes: una fase médica, en la que aprenden las ciencias médicas básicas, las afecciones y procesos que deben tratarse, una segunda parte en la que se estudian las diferentes técnicas que se utilizan en los tratamientos de rehabilitación, y una tercera parte de prácticas clínicas en las que los futuros terapeutas tratan directamente con diferentes tipos de pacientes y de patologías (físicas, psíquicas, sociales, etc.) bajo la supervisión de un profesional experimentado.
Como en otras profesiones relacionadas con la salud, los cursos de especialización y actualización de conocimientos son fundamentales para mantenerse al día y aprender nuevas técnicas. Por lo que, si ya cuentas con formación universitaria como terapeuta ocupacional, puedes realizar cursos complementarios sobre diferentes tipos de terapias.
Si ya tienes formación específica, también puedes realizar cursos concretos sobre diferentes tipos de terapias. Como las asistidas con animales, que son muy beneficiosas para niños y ancianos, o masajes de técnicas milenarias.
¿Dónde trabajan?
Los profesionales de la terapia ocupacional ejercen en multitud de ámbitos. Entre ellos, en residencias geriátricas, en escuelas e institutos, en centros de menores y en domicilios particulares.
Pueden ser empleados de asociaciones o de sociedades médicas. Pero también pueden ser profesionales independientes que ejercen por su cuenta.
Para ser un excelente terapeuta ocupacional necesitas tener y desarrollar una serie de habilidades blandas cada vez más necesarias en el mercado laboral. La más importante es el trato con las personas. Debes ser paciente, empático y saber transmitir confianza. También deberás ser creativo, para poder encontrar el mejor tratamiento para cada paciente. Y por el mismo motivo, también deberás ser observador y analítico.
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