Las tareas del cuidador de caballos pueden ser muy amplias y, sumado a que es posible que tengas que cuidar a un número elevado de animales, tienes que tener en cuenta que es un trabajo duro y de alta responsabilidad. Las funciones variarán dependiendo de si son caballos para el ocio, la formación ecuestre, la cría o la competición. Aún así, las principales tareas que ejercerás como cuidador son:
Planificación del trabajo. Tendrás que ocuparte de muchas tareas de diferente índole, por lo que la organización es fundamental.
Conducir y guiar a los caballos, tanto para su estancia en las instalaciones como para desplazarlos.
Mantenimiento y limpieza de las instalaciones (cuadras, pistas, prados) y el material (sillas de montar, arneses).
Observar a los caballos para poder detectar posibles enfermedades, además de curar heridas básicas, poner vendajes, etc.
Cuidado de los caballos: cepillado, recorte de pezuñas, alimentación, dietas específicas, cuidado de potros, etc.
Entrenamiento y mantenimiento físico: darás cuerda a los caballos, los montarás para ejercitarlos, e incluso ayudarás al profesor a dar clases.
También es recomendable que dispongas de un nivel básico de equitación en el caso de que tengas que realizar estas tareas de montar.
De ti dependerá la salud del caballo, por lo que debes tener nociones sobre anatomía, cuidados del caballo, fisiología, etc.
Estos conocimientos puedes obtenerlos a través de un Curso de Cuidador de Caballos. También puede interesarte la formación de Auxiliar de veterinario ecuestre o Auxiliar de herrador.
Asimismo, necesitas contar con una buena condición física, dedicarle muchas horas a tu trabajo y que te gusten estos animales, pues es una profesión muy vocacional.
-Criadero de caballos: aquí no montarás a los caballos, pero sí tendrás que tener conocimientos específicos sobre el cuidado de yeguas embarazadas, caballos sementales, partos y potros.
-Competiciones: el cuidador cumple una labor clave para el éxito del caballo. Prepararás a los caballos de saltos, de carreras, etc. Además, el cuidador suele acompañar al jinete profesional a las competiciones.
-Centros de formación ecuestre: seguramente tengas que montar a los caballos para ejercitarlos, e incluso domar a los potros o ayudar a dar las clases.
-Ayudantes de herradores, veterinarios, profesores de equitación: debido a los múltiples conocimientos que tienen sobre el animal, a muchos profesionales expertos en caballos les interesa tener cerca a un cuidador profesional.
-Propietarios privados de caballos: también puedes trabajar para una persona que, a nivel de uso privado, tenga uno o varios caballos en una finca. Puede que en este caso el trabajo incluya una vivienda en la finca para estar cerca de los caballos.
-Empresas turísticas ecuestres: la contratación de excursiones y paseos a caballo son cada vez más frecuentes en el turismo. Deberás ocuparte de que el caballo esté listo para estas actividades de ocio.
Síguenos en nuestras RRSS
Lo más leído
Contenido relacionado