¿Qué hace un Concept Artist?
El artista conceptual, o concept artist, se encarga del proceso de adecuación de las ideas a escenarios, personajes y situaciones concretas. Si hubiera que establecer un orden lógico, su trabajo se engloba después de la creación de los guiones y antes de la animación y el desarrollo de los aspectos visuales o VFX.
Dentro de este proceso, el artista conceptual debe encargarse de enseñar de forma clara aspectos del diseño de personajes o de diseño de criaturas que sean relevantes para la historia. Por ejemplo, si en el guión se especifica que un personaje en cuestión es huraño o huidizo, el concept artist deberá tener en cuenta estas características para plasmarlas de forma que salten a la vista. También será pieza clave en la creación de mundos dentro de las diferentes narrativas e incluso de la conceptualización de storyboards que más tarde serán de ayuda para los equipos de animación y de efectos visuales.
¿Cuál es el trabajo del Concept Artist?
El trabajo de fundamenta en numerosas funciones y tareas que habrá de desarrollar mediante colaboraciones interdisciplinarias con el resto de los equipos y profesionales, en especial con el equipo de animación, puesto que su trabajo es clave para afrontar esa etapa del desarrollo.
Los concept artist no se dedican solo a dibujar escenarios con ciertas especificaciones, sino que tienen una visión global de todo el universo del juego. Por eso, es común que su opinión sea muy importante en aspectos como la paleta de colores recogida, la decoración, la estructuración de los escenarios y las luces e iluminación utilizadas en uno u otro lugar.
¿Cómo dedicarse a ello?
Para formarte en aspectos que pueden ayudarte a trabajar como concept artist puedes elegir ramas artísticas relacionadas con la pintura o las artes gráficas. El arte digital te ayudará especialmente a poder trabajar con diferentes softwares o entornos. Para dominar las exigencias del trabajo, es esencial que tengas conocimientos sobre conceptos visuales, bocetos y croquis, ilustración e iluminación. Es decir, que domines la manera de plasmar un entorno o personaje para que exprese una idea concisa en una sola imagen.
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En este caso, tal y como pasa en muchas ocasiones en lo referente a profesiones creativas, ya se sabe que el dicho de “una imagen vale más que mil palabras” se aplica en esta profesión mejor que en ninguna. Para poder acceder al mercado, es imprescindible que dispongas de un portfolio, de manera que los estudios puedan valorar tu estilo de ilustración, ya que no solo cuenta que sepas los conceptos básicos, sino que tu manera de plasmar la realidad coincida con lo que buscan los estudios y profesionales.
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