Originaria de la India y con más de 5.000 años de antigüedad, se basa en la conexión de mente, cuerpo y espíritu. De hecho, la palabra yoga viene del voacblo «yuj» en sánscrito (lengua clásica de la India), que significa UNIÓN. Es un conjunto de movimientos y posiciones, de técnicas de respiración, de meditación y relajación a través de las cuales se busca el equilibrio y el bienestar: una energía vital pero también la serenidad mental. El yoga busca la reunificación con nuestro ser trascendente, ser lo que ya somos pero hemos olvidado, la existencia pura.
¿EN QUÉ CONSISTE EL TRABAJO?
Los textos tradicionales sobre yoga admiten varias lecturas, por lo que hay distintos tipos y las clases pueden ser muy variadas. Pero en esencia, el monitor de yoga es quien, desde la admiración y el respeto a esta disciplina, enseña las diferentes prácticas para ayudar a encontrar la armonía entre el cuerpo, la mente y la respiración.
Dentro de sus diversas prácticas (meditación, relajación, posturas, respiración, visualización creativa…) la más extendida en occidente es la de posturas. Aún así, una clase de yoga suele tener en común las siguientes técnicas:
Clases de yoga. Postura de Torsíon
• Dedicar un tiempo a la relajación a través de una de las principales técnicas del yoga: pranayama, para controlar la respiración a través de ejercicios.
•Después, normalmente tiene lugar el pawanmuktasana, el calentamiento preliminar al yoga de poses que se hace para quedar libres de rigidez y bloqueos.
• Entonces, es el momento de llevar a cabo el asana, que son las posturas dedicadas a trabajar sobre cuerpo y mente.
También existe el yoga vinculado al aspecto terapéutico, que se utiliza para mejorar situaciones médicas concretas. Es una potente herramienta para aliviar el dolor y tiene capacidad de actuación en múltiples enfermedades como el sida, el cáncer o la ansiedad.
En cualquier uso del yoga, el profesor debe conocer perfectamente el estado físico del paciente, así como sus capacidades y necesidades. Además, deberá hacer de su clase un entorno especial y apoyar a sus alumnos.
¿CÓMO Y DÓNDE PUEDES FORMARTE PARA SER MONITOR DE YOGA?
El yoga es una profesión no regulada por la ley, pero los centros en los que trabajes te van a pedir la certificación de tus conocimientos para asegurar que tienes el nivel suficiente. Además, se necesitan conocimientos sobre el cuerpo humano.
Obtendrás todos estos conocimientos en cursos que te capaciten para ser Monitor de Yoga.
>>Centros que imparten cursos de Monitor de Yoga
También puedes obtener estos conocimientos relacionados con la anatomía, fisionomía, etc. a través del Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, y luego puedes especializarte en un Postgrado en Yoga.
>>Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte
>>Postgrado de Monitor de Yoga
La formación es imprescindible tanto para conocer las raíces más profundas de esta ciencia de vida, como para tener la capacidad de enseñarla.
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