La labor de un arquitecto consiste en diseñar, planear y supervisar la construcción de edificios. Su trabajo no finaliza en el diseño, sino que es responsable del proyecto que se lleva a cabo y, por lo tanto, ha de permanecer involucrado en él en todo momento. Por otro lado, la tarea que ejecuta tiene repercusiones sobre la sociedad, por lo que ha de tener un gran sentido de la responsabilidad pública, porque de sus buenos diseños dependerá la seguridad de sus proyectos.
¿En qué consiste su labor?
La construcción es un proceso complejo que se lleva a cabo a través de una serie de fases. A continuación vamos a resumir los puntos principales que se determinan en una clasificación general de las mismas.
Interpreta las necesidades del cliente
En primer lugar, el arquitecto ha de reunirse con el cliente para conocer con rigor la idea de este y convertir sus necesidades e intereses en un proyecto viable lo más ajustado posible a sus expectativas. A partir de esta reunión, diseña del futuro proyecto atendiendo a la demanda del cliente, es decir, elabora el plano de obra. Una vez que la idea ya está perfectamente definida, incluidos los presupuestos, las necesidades técnicas y los tiempos de ejecución, el arquitecto ha de iniciar un trabajo de investigación sobre el lugar donde se construirá el edificio.
Elabora las propuestas de diseño y las presenta al cliente
La labor de la construcción se desarrolla, sin duda, en equipo, donde el entendimiento y el diálogo serán fundamentales para un trabajo eficiente. Una vez establecidas las cuestiones básicas para ponerse manos a la obra, el arquitecto elabora esbozos tanto del exterior como del interior del edificio con el objetivo de definir las proporciones mediante diseños a escala y definiendo más concretamente los tipos de materiales a utilizar. Normalmente este croquis se reconstruye a ordenador mediante programas como AutoCad para hacer una maqueta más exacta.
Una vez establecidos todos los puntos de nuestro proyecto, es hora de enseñarle la propuesta al cliente y conseguir que este la acepte. Una vez conseguida su aprobación, el contratista de la construcción comenzará con su trabajo a partir de los planos elaborados por el arquitecto.
Coordina y lidera el trabajo con los contratistas
El arquitecto suele estar en contacto con los urbanistas y los funcionarios de control de edificios para debatir sobre los permisos de planificación y los temas de salud y seguridad relativos al edificio. Cuando los contratistas llegan a un acuerdo con el empresario de la construcción, el arquitecto elabora el programa de trabajo, labor que también puede llevar a cabo el Arquitecto técnico.
Supervisa la obra
Durante la etapa de la construcción el arquitecto ha de visitar el lugar de la obra de forma periódica para comprobar que el trabajo se adecua las líneas de los planos establecidos y para dar especificaciones si fueran necesarias.
¿Qué necesitas estudiar?
El trabajo de un arquitecto, como has podido comprobar, aglomera una gran cantidad de aptitudes: conocimientos sobre materiales, diseño, liderazgo, entendimiento, adaptación… Esto hace que sea una de las carreras más complejas y más completas a las que puedes acceder. Si quieres convertirte en arquitecto, descubre qué grado necesitas estudiar y algunos cursos y másteres que marcarán la diferencia entre tú y el resto de posibles futuros profesionales de la construcción.
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