¿A qué se dedican los gerentes de crédito?
Los gerentes de crédito se encargan de supervisar las ventas de productos o servicios a crédito. Su principal misión es hacer que los riesgos que implican estas operaciones sean mínimos. Es decir, que la empresa para la que trabajan disponga siempre de capital en efectivo suficiente para afrontar otras operaciones y mantener el negocio.
Sobre todo en grandes empresas, son imprescindibles para asegurar que estas no quiebren. Trabajan en una gran variedad de tipos de negocio, desde los que producen bienes a los que ofrecen servicios, pasando por entidades financieras. Son por lo tanto, trabajadores muy solicitados.
¿Qué funciones tienen?
Los gerentes de crédito se encargan de recuperar el dinero adeudado a una empresa por sus productos o servicios. Entre sus funciones se cuentan el rastreo de cuentas, la negociación de pagos o la iniciación de acciones legales por impago.
Tienen dos áreas principales de acción:
- Créditos al consumo: Tomados por particulares, como para la compra de un electrodoméstico.
- Créditos comerciales: Se dan entre dos empresas.
En ambos casos, estos profesionales evalúan la solvencia de la empresa o persona que debe devolver el crédito. Implementan sistemas para avisar del pago y controlan el proceso. Así, si hay algún retraso, toman las medidas oportunas.
De este modo garantizan la existencia de efectivo de la empresa que proporcionó el producto o servicio.
¿Cómo convertirte en uno de estos profesionales?
Los gerentes de crédito son profesionales muy especializados relacionados con la economía y las finanzas. Deben tener conocimientos completos sobre comercio y negocios. Pero también sobre derecho en el caso de que deban emprender acciones legales por impago.
Como una de sus principales funciones es la negociación del importe y condiciones de un crédito, una de las habilidades más demandadas es la de la comunicación. Y al no trabajar solos, deberán tener también capacidad de liderazgo y de trabajo en equipo.
Por eso, para poder ejercer esta profesión, lo mejor es estudiar una carrera. Tienes varias alternativas, como los grados de Economía, Banca y Finanzas o dobles grados en ADE y Economía. También los grados que aúnan conocimientos sobre economía y derecho.
Una vez hayas finalizado tu carrera universitaria, también puedes completar tu formación con cursos específicos de finanzas sobre aspectos muy concretos de gestión empresarial.
Incluso puedes especializarte con algún máster en finanzas.
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