Muchas personas sueñan con tener su futuro asegurado con un trabajo para toda la vida. ¿Es este tu caso? Si es así, debes saber que opositar a la Unión Europea puede ayudarte a conseguir tu objetivo y, además, te permitirá trabajar en el extranjero y tener acceso a un buen sueldo. A continuación, te contamos todo lo que necesitas saber al respecto.
Requisitos para opositar a la Unión Europea
Para presentarte a una oposición a la Unión Europea tienes que cumplir una serie de requisitos que son los siguientes:
– Ser ciudadano de un estado miembro de la Unión Europea.
– No tener suspendidos los derechos como ciudadano.
– Tener un conocimiento muy elevado de una de las lenguas oficiales de la Unión Europea, así como un nivel alto de inglés, francés o alemán.
– Contar con el título académico exigido para acceder al puesto al que te presentas.
Ten en cuenta además que, en algunos puestos, se te puede pedir también cierta experiencia profesional.
Procedimientos para presentarse a una oposición en la Unión Europea
Si has decidido presentarte a una oposición de la UE debes seguir el procedimiento establecido, que es el siguiente:
1. Rellenar un formulario de inscripción y enviarlo a la EPSO (Oficina Europea de Selección de Personal) en el plazo que se establezca en la convocatoria. A las 48 horas de inscribirte, recibirás un correo para reservar la fecha y el lugar donde tendrán lugar las pruebas de preselección.
2. Realizar las pruebas de preselección a través de un ordenador y desde alguno de los estados miembro. En esta fase, tendrás pruebas de capacidad cognitiva, aptitudes profesionales y juicio de situaciones.
3. Presentarte a la fase de evaluación, que realizarás en Bruselas, donde se analizará tu capacidad para desempeñar las funciones del puesto. Estas pruebas las realizarás en tu segunda lengua, excepto que para el puesto se te requiera un idioma específico.
Tipos de oposiciones en la Unión Europea
Si quieres ser funcionario de la Unión Europea, hay dos categorías a las que puedes optar:
Administradores
Las tareas que se realizan en este puesto son, principalmente, la elaboración de políticas y la aplicación de la legislación comunitaria, así como el análisis y el asesoramiento. Estos perfiles también pueden intervenir en los procesos legislativos y presupuestarios dentro del marco comunitario, coordinando diferentes políticas entre los estados miembros, participando en negociaciones comerciales con países no pertenecientes a la Unión Europea o representando a la comunidad en foros internacionales.
Otras actividades que puedes desarrollar son inspeccionar flotas pesqueras, gestionar programas de investigación científica o redactar decisiones judiciales de los organismos comunitarios.
Asistentes
En este tipo de puestos se realizan funciones de apoyo, como son las de contabilidad, secretaría, comunicación o desarrollo. La labor de estos perfiles es muy importante para el normal desarrollo de las instituciones en materia de presupuestos, informática o gestión documental.
En definitiva, si estás buscando un empleo que te ofrezca una estabilidad total y te seduce la idea de trabajar en el extranjero, opositar a la Unión Europea puede ser una opción fantástica para ti. ¡Conviértete en funcionario comunitario!
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