¿Cómo funciona un tribunal de oposiciones?

De todos los que conforman el proceso, uno de los elementos que más inquieta al opositor es, sin ninguna duda, el propio tribunal de oposiciones. Conocer de antemano quiénes son, así como las características que suelen tener este tipo de jueces, nos ayudará a afrontar ese momento con más tranquilidad. Te contamos cuáles son sus derechos y obligaciones, así como las funciones que se les encomienda en las convocatorias de cada prueba.

El proceso de formación de un tribunal de oposiciones

Un tribunal de oposiciones es un órgano público, de carácter profesional y especializado. Se forma por mandato de la administración correspondiente para actuar con independencia, rigor, imparcialidad y objetividad en un proceso selectivo vía oposición.

El tribunal se encarga, principalmente, de calificar las pruebas de selección de las que consta la oposición. Por lo tanto, su responsabilidad es máxima y, salvo en contadas y bien justificadas ocasiones, un miembro de un tribunal no puede renunciar a formar parte del mismo si resulta seleccionado.

Los aspectos más importantes de un tribunal de oposiciones que deberías conocer, son los siguientes:

• Todos sus miembros son funcionarios de carrera con un nivel de titulación igual o superior al exigido para el ingreso al cuerpo o escala de que se trate.

• Serán seleccionados siguiendo los principios de igualdad, mérito y/o capacidad entre los posibles candidatos. Cada administración podrá abrir un plazo para aquellos que, de forma voluntaria, decidan presentarse como miembros del tribunal.

• El número de miembros de un tribunal siempre será impar, no pudiendo ser menos de 5. En todo caso, el tribunal deberá contar con el mismo número de suplentes.

• Se requiere una presencia equilibrada de hombres y mujeres en dicho tribunal.

• El tribunal estará formado por un presidente, un secretario y una serie de vocales elegidos al azar.

• Al presidente lo elegirá la administración correspondiente. Por ejemplo, la delegación provincial o la consejería.

• De igual forma se procederá en la elección del secretario, escogido entre los vocales. Este se encargará de los aspectos administrativos y burocráticos del proceso de selección.

Las funciones y otras particularidades de estos tribunales

Una vez que se ha configurado el tribunal, su función principal es examinar a los candidatos que ocuparán las plazas ofertadas en la oposición. Gran relevancia toma, en este sentido, el examen oral, siempre y cuando forme parte de las pruebas de esa convocatoria. Pero además de esta función, los miembros del jurado se encargan de tres importantes tareas más:

• Elaborar los listados definitivos de calificación en cada una de las pruebas.
• Custodiar los exámenes durante la duración íntegra del proceso de selección.
• Velar por el riguroso cumplimiento del reglamento y las normas que rigen la convocatoria.

Por último, es interesante destacar uno de los elementos más desconocidos de los tribunales de oposiciones: su remuneración, que está regulada por ley. Estos salarios dependen de varios factores, según el tipo de oposición o bien en función de la administración que haya convocado la prueba.

Como normal general, los miembros del tribunal perciben un sueldo base en torno a los 1.000 euros brutos por su participación. A esta cantidad se añaden una serie de complementos por cada sesión. Concretamente, entre 40-50 euros para un vocal y entre 100-150 euros para el secretario o el presidente. Por último, perciben también cantidades en concepto de desplazamiento, manutención, alojamiento o aparcamiento.