Como otras profesiones, la de docente no es siempre una vocación temprana. Muchos estudiantes de educación superior se dan cuenta de que las opciones profesionales que les quedan al terminar son quizá más reducidas de lo que pensaban. En ese momento se les presenta la enseñanza como una opción lógica.
En realidad, la profesión de docente es solo una de las que requieren un Máster Habilitante para poder ejercerlas. Esto se debe a que es una actividad profesional regulada. Por ejemplo, antes de ejercer el Derecho o la Psicología, también deberías cursar uno que te permitiría poder establecerte profesionalmente.
Una vez has decidido que quieres ser profesor, tendrás que cursar el Máster Habilitante en la universidad que elijas. Es una formación de postgrado que se compone de 60 créditos ECTS, y su duración es de un año. Una vez se complete tu formación teórica, tendrás que pasar por un período de clases prácticas en un centro de enseñanza. Esta fase se denomina Prácticum.
Para poder matricularte en el Máster habilitante y ser profesor debes cumplir algunos requisitos.
Una vez hayas superado este Máster Oficial podrás ejercer como docente en Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y la enseñanzas de Idiomas.
Existen diversas especialidades, en función de cuál es el tipo de enseñanza que deseas impartir. Estos son algunos ejemplos:
Ejercer el profesorado es la opción que eligen muchas personas, bien por vocación o como posibilidad alternativa a los estudios que han realizado. En cualquier caso, es una profesión que requiere de un grado de compromiso muy alto, para el que no todo el mundo está preparado.
Si elijes ser profesor o profesora, y apruebas unas oposiciones a la administración o consigues plaza en un centro privado, descubrirás que puede ser un trabajo apasionante y enriquecedor. Pero, si en todos los empleos son importantes las soft skills, las habilidades blandas no técnicas, para un profesor lo son aún más.
Algunas de las cualidades que debes poseer y desarrollar al máximo para ser un buen docente son:
Por otro lado, debes estar dispuesto para la formación continua y ser permeable al cambio. A lo largo de tu carrera profesional tendrás que adaptarte a diversas leyes educativas. Pero también a cambios sociales y de mentalidad profundos entre las sucesivas generaciones de alumnos, por lo que la adaptación es continua en esta profesión.
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22 de noviembre de 2022