Un Máster en Dirección de Empresas o MBA es el postgrado por excelencia. Numerosas personas deciden estudiar un MBA cada año por los beneficios que supone adquirir los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para gestionar una empresa desde una perspectiva global.
Sin embargo, estudiar un MBA supone una inversión en tiempo y dinero que hace replantearse a los interesados si es una buena idea, especialmente en periodos de crisis. Se trata de una decisión individual donde es necesario estudiar las ventajas y desventajas de estudiar un MBA.
Según el programa elegido, el MBA se puede adaptar completamente a las necesidades de cada persona y el momento de su carrera profesional en el que se encuentre. El Executive MBA está orientado a profesionales con experiencia que buscan especializarse o actualizar sus conocimientos. En cambio, un MBA junior o a tiempo completo es una excelente opción para recién graduados que carezcan de la experiencia necesaria para gestionar una empresa.
Otra opción son los MBA Internacionales, destinados a perfiles que quieren ampliar su proyección internacional para ajustarse a las necesidades de expansión de su compañía o porque quieren acceder a puestos en el extranjero. Y para todos ellos, existe la posibilidad de realizarlos en remoto permitiendo compaginar los estudios con la vida laboral o personal.
En cuanto a los requisitos para estudiar un MBA, además de contar con una titulación superior, cada centro o escuela de negocios establece sus propios criterios, que pueden pasar por tener un buen nivel de inglés, poseer un buen expediente académico o currículum, contar con cartas de recomendación o superar las pruebas de su particular proceso de admisión.
Es innegable que, al contar con MBA en el currículum, cualquier profesional adquiere una mayor proyección dentro de su empresa, al tiempo que aumenta su valor para otras compañías. Es, por tanto, un elemento diferenciador.
Para valorar los beneficios de estudiar un MBA actualmente, hay que tener claro, en primer lugar, los objetivos que se desean conseguir. Es cierto que supone una fuerte inversión en tiempo, dinero y esfuerzo, pero en momento de crisis, en los que las empresas se vuelven más cautas y selectivas a la hora de contratar o promocionar a sus empleados, un MBA puede convertirse en un argumento que permita al profesional llegar a alcanzar el puesto deseado.
De igual manera, un MBA resulta muy conveniente para aquellas personas que estén pensando en emprender y fundar su propia empresa, ya que proporcionará un conocimiento 360º de las estrategias a seguir para alcanzar el éxito empresarial.
Otro factor a tener en cuenta es su duración y precio. Estos programas suelen prolongarse más allá de los 12 meses. En cuanto al coste, se pueden valorar posibilidades de financiación o becas.
Existen muchos centros que ofrecen la posibilidad de estudiar un MBA. Una vez que tengamos localizado el programa que queremos seguir, debemos tener en consideración determinados criterios, como el prestigio del centro y el profesorado, la metodología a seguir y los conocimientos, destrezas y habilidades que podremos conseguir. Entre los programas más destacados se encuentran los siguientes:
En tiempos de crisis como el actual, estudiar un MBA se convierte en un elemento diferenciador. Siempre que las condiciones del alumno lo permitan, es una oportunidad perfecta para conseguir ingresar con éxito en el mercado laboral. También para promocionar en la compañía o montar una empresa propia.
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