Muchas personas que quieren trabajar en el sistema universitario saben que el camino más habitual para conseguirlo es haciendo un doctorado y consiguiendo una beca predoctoral. No obstante, hay otras vías. Te lo explicamos y te contamos cómo ser profesor asociado en la universidad. Descubre qué es esta figura y cómo puedes llegar a conseguir este tipo de contrato.
Los profesores asociados a la universidad son profesionales que trabajan dentro del sistema universitario pero que compaginan la docencia con otro empleo en el ámbito privado. De hecho, muchos de estos perfiles tienen incluso negocios propios.
Para que una persona pueda ser contratada como profesor asociado debe trabajar, eso sí, en el ámbito o sector relacionado con el Grado o Máster en el que imparta clase. De este modo, por ejemplo, un arquitecto que tenga su propio estudio puede dar clase de diferentes asignaturas de Arquitectura y Arquitectura Técnica. Así, se garantiza que este tipo de docentes puede aportar al alumnado su experiencia.
Las horas de dedicación a la semana en el caso de los profesores asociados son de un mínimo de 3 y un máximo de 6. En el caso del sueldo, este es proporcional al tiempo invertido. De esta forma, las tareas docentes se consideran complementarias a su trabajo principal.
Para ser profesor asociado en la universidad, tienes que contar con un buen currículum y acreditar ante un comité tu experiencia profesional. Además, debes demostrar que tienes un empleo fuera del sistema universitario.
Recuerda que lo primero que tienes que tener claro a la hora plantearte presentarte a un puesto de profesor asociado es la disponibilidad y la capacidad de trabajo con la que cuentas, ya que si tu empleo principal te consume muchas horas, probablemente no sea una buena opción para ti. Ten presente que la docencia exige horas de dedicación dentro y fuera de las aulas.
Otro aspecto importante que debes conocer es que el contrato de profesor asociado es de carácter temporal y que, aunque puede renovarse, no es un dinero con el que puedas contar de por vida.
Por último, ten claro también que debes estar siempre actualizado para ser un buen docente asociado, ya que lo que se espera de este tipo de perfiles es que proporcionen todo el aprendizaje adquirido en el sector en el que trabajan. Así, tu tarea es la de aportar aire fresco y conocimientos novedosos que son externos al ámbito académico y que permiten al alumnado estar en contacto directo con la profesión que quieren llegar a desempeñar algún día.
Ahora ya has descubierto cómo ser profesor asociado en la universidad y ya sabes que esta figura no es la de un docente del ámbito académico sino la de un profesional de un sector concreto que comparte sus conocimientos al alumnado universitario. De este modo, este empleo siempre es complementario. No obstante, te permite trabajar dentro de la universidad sin haber hecho un doctorado. Si esta fórmula te interesa, no dudes de que será un aprendizaje muy interesante y una experiencia muy satisfactoria para ti.
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