Celebrando el Día del administrador de sistemas informáticos
Cada año se celebra el Día del administrador de sistemas informáticos o SysAdmin Appreciation Day. Desde el año 2000 se homenajea esta profesión el último viernes del mes de julio gracias al impulso del sysadmin Ted Kekatos. El objetivo es reconocer las habilidades y competencias del perfil necesario para facilitar el cotidiano uso informático de los dispositivos. La opción que elijas para tu formación debe atender también a los otros requisitos que necesitas, como el nivel de inglés o el razonamiento lógico-matemático.
Las funciones de un administrador de sistemas informáticos pueden parecer sencillas, pero incluyen una amplia gama de tareas. Deben tener conocimientos técnicos tanto sobre ordenadores y redes como sobre programas y aplicaciones diversas. En una empresa tu función principal sería supervisar y gestionar sus sistemas operativos.
Ahora es cuando estás preguntándote sobre el salario, ¿verdad? El promedio en España es de 28.000€ al año. Los cargos de nivel inicial comienzan con un ingreso de 22.500€ al año, mientras que profesionales más experimentados perciben hasta 36.000€/año. Cuidado con las ofertas porque debes asegurarte de que lo que están buscando se corresponde con el contrato que ofrecen. Por ejemplo, puede que quieran contratar un ingeniero administrador de sistemas Senior pero pagar por uno Junior.
¿Qué opción es mejor: FP medio, superior o Grado?
En cuanto a los estudios, la opción más corta, rápida y con mayor proyección profesional en la actualidad es la formación profesional, en concreto, el FP Administración de Sistemas Informáticos. Estos módulos son títulos formativos de Grado Superior, por lo que están bastante bien considerados. A diferencia de la carrera universitaria, en este caso podrás realizar muchas prácticas.
Sin embargo, es importante que en los estudios que elijas te entrenen también para desarrollar otras habilidades necesarias para ser administrador de sistemas además de las competencias técnicas fundamentales:
- Trabajo en equipo: es importante que cuentes con habilidades comunicativas para coordinar las tareas con distintos perfiles.
- Gestión del tiempo: sueles trabajar por proyectos, con hitos marcados para las entregas, que dependen de la colaboración de los compañeros.
- Capacidad de análisis, síntesis y resolución de problemas: las incidencias se van recreando a medida que se incorporan nuevos sistemas y aplicaciones. En este sentido, la formación continua es crucial.
- Práctica en trabajo bajo presión: las demandas de resolución de las incidencias suelen ser urgentes e implican no suspender el servicio, así que debes saber gestionar las emociones.
- Conocimientos técnicos globales: uso de computadoras, TIC, bases de datos y sistemas operativos. También es importante que tengas un nivel alto de inglés y razonamiento lógico-matemático.
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