Los estudios de medicina y de enfermería en la actualidad
Tradicionalmente, los estudios enfermería o medicina han sido de los más exigentes para los estudiantes, tanto en el acceso como en su desarrollo posterior en cualquier universidad española. Esto tiene una relación directa con el grado de excelencia de nuestros profesionales sanitarios y con el nivel de servicio del sistema español que, pese a sus muchas y complejas dificultades, continúa siendo de los mejores del mundo.
Si estás pensando estudiar medicina o enfermería debes saber, de entrada, que las últimas notas de corte rondan los 13 puntos en medicina en todas las universidades. De la misma forma, en enfermería, están en torno a los 12 puntos. Debes, por tanto, emplearte a fondo en los estudios previos con los que quieras acceder a estos Grados.
Si llevas tiempo pensando en estas carreras, debes ser consciente que requieren esfuerzo y sacrificio. Establece cuanto antes un plan de estudio exhaustivo y ambicioso, pues el objetivo debe ser el de obtener la mejor de las calificaciones posibles en las pruebas de acceso. Solo así tendrás posibilidades de conseguirás tu plaza.
Una vez lo consigas, debes saber que el plan de estudios del Grado de Medicina consta de 6 años. A los que hay que sumar el año de preparación del examen MIR, y el periodo de formación especializada que supone entre 3 y 5 años más, según la especialidad que se prepare. Tras la última publicación de la convocatoria MIR, el BOE establecía en España unas 45 especialidades médicas distintas. Tienes, por tanto, seis años para reflexionar y decidir al respecto.
Si optar por estudiar el Grado en Enfermería serán 4 años de carrera. Tras ellos, puedes acceder a una de las siete especialidades de enfermería recogidas actualmente: Obstétrico-Ginecológica (Matrona), Salud Mental, Geriátrica, Trabajo, Médico-Quirúrgica, Familiar y Comunitaria, Pediátrica.
Estas especialidades se cursan en unidades docentes del sistema sanitario como Enfermeros Internos Residentes (EIR), siguiendo un modelo similar al de los médicos residentes (MIR).
Habilidades requeridas y oportunidades de trabajo
Son muchas las aptitudes que se le presuponen a un/a médico/a o enfermero/a. Unos y otros comparten una gran capacidad de análisis y de síntesis, así como la habilidad para identificar, formular y resolver problemas o tomar decisiones. A su vez, deben ser personas observadoras y reflexivas, con capacidad para el trabajo en equipo y tolerantes a la frustración, el estrés o la ansiedad. Por supuesto, son profesionales con una encomiable capacidad de resistencia.
Pero, por encima de todo, un/a médico/a o un/a enfermero/a deben tener vocación. Deben ser personas con un fuerte deseo vital de atender y cuidar de los demás, con una gran vocación de servicio al otro. Más allá de su excelente preparación, los médicos muestran siempre una enorme profesionalidad en todos los ámbitos en los que trabajan.
Un médico puede desarrollar su labor en diferentes contextos. En hospitales públicos o privados, en centros de atención primaria y en clínicas. Además de en todo tipo de servicios auxiliares, así como en las empresas, los colegios o, incluso, realizando labores de investigación. Hoy en día, como señalábamos al principio, tras los estragos que ha producido la pandemia a nivel mundial, los profesionales de la medicina son necesarios en todas las partes del mundo.
Un profesional de enfermería, por su parte, podrá desarrollar su labor asistencial igualmente en hospitales, centros de atención primaria o servicios de urgencias y emergencias. A su vez, también en empresas, colegios o residencias. En todos ellos, ofreciendo un servicio de cuidados inestimable e imprescindible hoy en día.
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