El chino es el idioma más hablado del mundo, y la lengua de la segunda potencia económica mundial. Cada vez son más los acuerdos comerciales que se establecen con China, por lo que las empresas valoran mucho que sus candidatos sepan este idioma.
Aprender el idioma del país más grande del mundo es una alternativa interesante. Rusia es una potencia emergente que cada vez cobra más importancia en la economía mundial. Estudiar este idioma nos dará la oportunidad de diferenciar nuestro currículum y orientar nuestro aprendizaje hacia el futuro.
Si tenemos en cuenta la cercanía con Italia y la globalización de la economía, una buena opción para encontrar trabajo con mayor facilidad es aprender italiano. Estudiar el idioma del arte y la cultura es una decisión práctica, pues es un idioma con buen acogimiento en el mundo laboral, que además es sencillo y agradable de aprender.
Japón es la tercera economía del mundo. Cada vez es más habitual establecer relaciones comerciales con empresas japonesas, por lo que el conocimiento del idioma nos abrirá muchas puertas profesionales. Además, trabajar en Japón puede convertirse en una experiencia interesante y enriquecedora.
Sólo por el hecho de que Portugal es nuestro vecino, ya resulta práctico aprender portugués. Si a eso le sumamos que también es el idioma de Brasil, una de las potencias emergentes con mayor futuro, estudiar portugués es una salida profesional interesante.
Si queremos trabajar en Cataluña un requisito imprescindible para muchas empresas es saber catalán. Si no tenemos conocimiento alguno, lo mejor es realizar un curso de catalán para poder desenvolvernos en el trabajo y saber resolver situaciones de la vida cotidiana.
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