El currículum o CV es tu principal carta de presentación ante una empresa o negocio. Todos los CV tienen varias partes que debes conocer. Pero en un CV de estudiante sin experiencia laboral, la sección dedicada a este apartado no existe.
Por eso, es imprescindible que tu CV de estudiante sea excelente. Y forma parte de los principales pasos para buscar empleo después de los estudios.
Si nunca has redactado uno, es posible que no sepas cómo afrontarlo. Pero tranquilo, es más sencillo de lo que crees. Lo primero que debes tener en cuenta es que deberás redactar un CV para cada candidatura, ya sea espontánea o como respuesta a una oferta de empleo. Otra de las cosas que no pueden faltar es una buena estructura y claridad. Cada apartado deberá ser perfectamente diferenciable del resto, con un tamaño de letra mayor de 10 puntos y un interlineado mínimo de 1,2. Y por supuesto, deberá estar bien redactado. Nada de frases largas ni faltas de ortografía.
Ten en cuenta que los reclutadores no suelen invertir más de 5 minutos en la lectura de un CV. Por eso es importantísimo que el tuyo esté encabezado por tu información de contacto y tus datos personales.
A continuación escribe un pequeño párrafo de presentación sobre ti mismo. Deberá contener una pequeña descripción, lo que puedes aportar a la empresa y tus metas profesionales. Añade algún logro que hayas conseguido durante los estudios, como el tema y la nota de tu TFG.
Tus estudios son tu principal activo en la redacción de un CV excelente. Hay varias maneras de destacar la formación en el CV, pero en tu caso es conveniente que lo hagas separando la formación reglada de la que no lo es.
Si has realizado prácticas en alguna empresa, comienza por aquí. Indica en qué empresa estuviste, durante cuánto tiempo y qué conocimientos y experiencia adquiriste.
Coloca ahora tus estudios universitarios o de FP. Hazlo de forma inversa, es decir, primero los más recientes. Anota primero, el nombre de la titulación; después, el de la institución y finalmente, el año de inicio y el de consecución del título.
Si has realizado otros cursos, como idiomas, inclúyelos también siguiendo el mismo esquema anterior.
Y si has recibido premios, también deberás resaltarlos.
Estudiar proporciona habilidades blandas y estas mejoran tu empleabilidad. Así que no te olvides de incorporarlas a tu CV para hacerlo excelente.
Selecciona las que se adapten más al puesto al que te presentas. Para ello, consulta la web de la empresa y lee cuidadosamente la oferta de empleo.
Algunas de las habilidades más solicitadas son la de organización, el trabajo en equipo y una buena capacidad de comunicación oral y escrita. Entre las habilidades duras se cuentan el manejo de programas informáticos.
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