Despachador de vuelos

Los despachadores de vuelos, conocidos también como encargados de operaciones de vuelo, realizan una labor esencial para cualquier compañía aérea. En su día a día, estos profesionales se encargan de la supervisión y control de todo lo necesario para que un avión pueda despegar, volar y aterrizar en condiciones óptimas de seguridad y legalidad, con eficacia y rapidez.

¿EN QUÉ CONSISTE SU TRABAJO?

La labor de un despachador de vuelos empieza mucho antes de que se presente la tripulación en el aeropuerto, y no termina hasta después del aterrizaje. A grandes rasgos, su trabajo se podría dividir en tres etapas:

   CONTROL OPERACIONAL

El despachador de vuelos determina si un vuelo en particular es operacional y técnicamente realizable, y si hay aviones y tripulaciones adecuadas disponibles para realizar ese vuelo. Analiza la información de cada vuelo y de la mejor ruta en función de la adecuación de pistas, horarios de la operación y demás limitaciones que puedan surgir. Conjuntamente con el piloto, determina también la carga de combustible y las actuaciones de despegue; efectúa el seguimiento del plan de vuelo (FPL) y asiste a la tripulación durante el tiempo en el que están en el aire, facilitándole información meteorológica, datos del aeropuerto de destino, cambios en ruta, etc.

   PLANIFICACIÓN DEL VUELO

Durante esta etapa, el despachador realiza el plan operacional de vuelo, en el que incluye información sobre las condiciones meteorológicas o las características del avión y de los aeropuertos de despegue y aterrizaje. Y lo más importante, muestra la ruta óptima que debe seguir el avión y cómo debe seguirla: a qué velocidad y altitud, cuánto combustible va a necesitar, cuánto pasajeros y carga puede llevar y cómo se tienen que distribuir, y todo ello siguiendo la normativa aérea nacional e internacional y la de la propia aerolínea.

Una vez recopilada toda esta información, el despachador somete el plan de vuelo a la aprobación y firma del piloto, y entre los dos hacen los ajustes necesarios.

   ASISTENCIA Y MONITORIZACIÓN DEL VUELO DESDE TIERRA

El trabajo del despachador no termina con el despegue del avión, sino que lo sigue vigilando durante todo el tiempo que éste está en el aire. A través de complejos sistemas de vigilancia, el despachador supervisa el desarrollo del vuelo, controla que transcurre todo según lo programado y está alerta por si surge cualquier imprevisto, además de servir de apoyo a la tripulación.

¿CÓMO CONVERTIRTE EN DESPACHADOR DE VUELOS?

No existe (todavía) ningún requisito o licencia de acceso a esta profesión, por lo que, en teoría, cualquier persona podría dedicarse a este trabajo. Sin embargo, en la práctica, las aerolíneas sí que exigen a sus futuros empleados que tengan formación especializada en el área; es decir, que posean conocimientos en gestión de operaciones en tierra, planificación de vuelos, gestión de slots, manejo de aplicaciones y sistemas de seguimiento de vuelos, etc.

Además, si quieres desarrollar tu carrera profesional en este ámbito, también necesitas contar con un nivel de inglés alto, el idioma de comunicación por excelencia en el mundo de la aviación.

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 SALIDAS PROFESIONALES

Una vez que ya tienes tu formación como despachador de vuelos se te presentan varias opciones. Por un lado, que te contraten en alguna aerolínea comercial, para lo que deberás pasar una proceso de selección en el que se medirán tus conocimientos y habilidades. Por otro, superar una oposición de nivel D y conseguir una plaza como Técnico de Programación y Operaciones en Aena.