Según un estudio reciente elaborado por El Economista, casi un 90% de las empresas españolas consideran imprescindible la formación de sus trabajadores para hacer frente a la crisis. De ellas, casi un 25% aumentarán las inversiones en este ámbito. Sin embargo, un 65% de estas empresas reducirán las aportaciones que dedican a la capacitación de su plantilla.
Pero no dejarán por ello de invertir en cursos cuyos contenidos consideran de gran importancia. La mayor parte de esta formación será de carácter no presencial, con un aumento de esta respecto a años anteriores. Y también aumenta el porcentaje de enseñanza de carácter mixto dirigida a los trabajadores.
La crisis generada por la pandemia afecta de modo especial a las empresas que no son competitivas. Para mantener, y a ser posible, aumentar, la competitividad, la formación de la plantilla es imprescindible. Pero no se debe invertir en cursos para la capacitación de los trabajadores a ciegas. Es necesario realizar un estudio previo de las necesidades específicas de la compañía.
Pese a que estas necesidades son diferentes dependiendo del ámbito al que se dedique la empresa, todas ellas se desarrollan siguiendo un hilo conductor: las habilidades fuertes y blandas. Afectan a toda la jerarquía, pero en especial al equipo directivo que debe definir la estrategia empresarial.
Según el estudio señalado, hasta un 61% de compañías de nuestro país priman la formación centrada en las soft skills. Dentro de estas habilidades blandas destacan aquellas orientadas por una parte a la gestión y, por otra, al desarrollo personal. Un porcentaje también elevado (42%) persigue mejorar las hard skills en relación con el tipo de puesto de trabajo. Finalmente, casi un 40% se decanta por promover la formación de su plantilla en los nuevos retos derivados de la pandemia.
En todos los casos, el acento se pone en implementar correctamente y desarrollar de forma eficaz el trabajo a distancia. Dentro de esta nueva tendencia al trabajo desarrollado fuera del entorno de la oficina, la toma de decisiones de forma autónoma y eficiente es fundamental. De hecho, un 44% de las empresas españolas prefieren este tipo de formación para su plantilla. Para el 35% de ellas es también de vital importancia el desarrollo de las técnicas de comunicación. Especialmente enfocado al equipo directivo se encuentran los cursos de liderazgo. Mientras que para todos los trabajadores, es esencial recibir formación en gestión de tiempo. En el entorno online en el que preferentemente se desarrolla ahora la actividad laboral, la formación orientada a las habilidades digitales y en concreto, a las tecnologías de la información, adquiere también una gran importancia.
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