Simulaciones clínicas para formarse en sanidad

Paradas cardiorespiratorias, partos, ecografías, ventilación manual, tratamiento de arritmias, sondajes, punciones… las simulaciones permiten a los estudiantes de profesiones de la salud enfrentarse a todo tipo de escenarios, practicando en pacientes (casi) reales. ¿Te interesa conocer esta forma de aprendizaje?

La simulación es una técnica de aprendizaje con la que se pretende sustituir la realidad por un escenario simulado en el que estudiantes y profesionales sanitarios pueden entrenar para saber cómo desenvolverse en diversos escenarios. En algunas profesiones esta práctica es imprescindible, tanto para fijar los conocimientos adquiridos de forma teórica como para saber enfrentarse a situaciones críticas.

Este el caso de las personas que se dedican a las ciencias de la salud, que necesitan tener un alto nivel de entrenamiento para evitar errores que pueden poner en riesgo vidas humanas. Por ello, en las universidades se están formando nuevos perfiles profesionales en salud con ayuda de los últimos avances tecnológicos.

Los primeros simuladores clínicos surgieron en la década de los 60. Eran maniquís médicos para el entrenamiento de la reanimación cardiopulmonar. Poco a poco se fueron incluyendo otros que simulaban diferentes tareas y situaciones, y hoy en día se ha convertido en una técnica docente muy eficaz para entrenar equipos en situaciones clínicas complejas.

El hospital virtual de la UCV

La Universidad Católica de Valencia ha inaugurado este año un hospital virtual, que pretende convertirse en un espacio de referencia a nivel nacional y europeo, y que reproduce con gran realismo las estancias propias de un hospital real, dotado con equipamiento técnico de última generación y con pacientes (maniquíes) que respiran, hablan, tienen constantes vitales que cambian según los tratamientos e incluso que dan a luz o mueren.

Más de 1.600 metros cuadros donde se reproducen de forma hiperreal un servicio de urgencias, una UCI de adultos y otra UCI pediátrica, así como laboratorios, quirófanos generales y de partos y salas de dilatación. Todos equipados con el material e instrumentos que se pueden encontrar en cualquier hospital real.

El objetivo, explica Constantino Tormo, jefe médico y director del centro, es que los alumnos puedan “desarrollar todos los procedimientos, adquirir todas las competencias que un personal sanitario necesita, desde lo más sencillo hasta lo más complejo”.

En estas instalaciones estudiantes de los Grados de Medicina, Enfermería, Odontología, Nutrición Humana y Dietética, Fisioterapia y Podología de la Universidad Católica de Valencia trabajan juntos, como si fueran un equipo multidisciplinar, para adquirir las competencias clínicas y habilidades técnicas que previamente han estudiado en las clases teóricas. A través de las simulaciones, refuerzan y desarrollan sus capacidades profesionales y también habilidades no técnicas como el trabajo en equipo, la comunicación, el liderazgo o la toma de decisiones.

Cómo actuar en situaciones críticas

Para entrenar a los estudiantes, cada espacio está conformado por una zona de briefing, una zona de trabajo y una sala de control. De tal modo que, mientras los alumnos están ejerciendo la práctica sobre pacientes simulados, los profesores observan y siguen en directo o desde la zona de control la simulación, para ver las respuestas ante las diferentes situaciones que se plantean, y graban las sesiones para luego analizarlas.

Se simulan urgencias, operaciones, partos normales y complicados, controles de cuidados intensivos y todo tipo de actividades asistenciales con las que los alumnos pueden entrenar: habilidades de ventilación manual, mecánica invasiva y no invasiva, diagnóstico y tratamiento eléctrico de arritmias letales, sondajes, punciones básicas y avanzadas, ecografías básicas y avanzadas, paradas cardiorespiratorias…

“Ofrecemos la posibilidad de que el alumno toque muchas cosas y de que lo vea todo” revela Laura Cubero, coordinadora de enfermería en el centro, “Que no se limite solo a lo que es una planta de hospitalización, una cama y un paciente, sino que tenga la posibilidad de interactuar con un equipo multidisciplinar como son los compañeros de medicina, con diferentes especialidades, o diferentes circunstancias que puedan acompañar a un paciente en un proceso de hospitalización”.