El cuerpo de la Policía se divide en Policía Nacional, Policía Local y Guardia Civil. Descubre cuáles son las principales diferencias de sus respectivas oposiciones y cuáles son las funciones específicas de cada cuerpo.
Las funciones de la Policía Nacional son muy diversas y dependen de las áreas en las que se trabaje. Las comisarias generales, las jefaturas superiores, las comisarias provinciales y locales gestionan y administran las siguientes áreas:
• Seguridad ciudadana
• Policía judicial
• Policía científica
• Extranjería y fronteras
• Información
La Policía Nacional, a su vez, cuenta con múltiples especialidades: grupo especial de operaciones, el servicio de helicópteros, las unidades de intervención policial, los guías caninos, la caballería…
¿Qué tienes que hacer para trabajar en alguna de ellas? Pasar por el proceso de selección que conlleva una oposición. Entérate de los requisitos que necesitas para presentarte y de las pruebas por las que tendrás que pasar.
Los requisitos que hay que reunir antes de presentar las instancias para opositar a los Cuerpos de Policía Nacional son:
• Ser español o tener la nacionalidad española
• Ser mayor de edad
• Estatura mínima de 1,60m para mujeres y 1,65m para hombres.
• Poseer o estar en condiciones de obtener el Título de Bachiller o equivalente antes de que finalice el plazo de presentación de solicitudes.
• No haber sido separado mediante expediente disciplinario del servicio de las Administraciones Públicas (Estado, Administración Autonómica, Local o Institucional).
• Compromiso de portar armas y, en los casos previstos por la ley, usarlas.
• No haber sido condenado por un delito doloso.
• Poseer el permiso de circulación de clase B.
Además de los requisitos mencionados, existen una serie de exclusiones médicas que pueden dejarte fuera del proceso selectivo.
Para superar la oposición a Policía Nacional tendrás que pasar con éxito las pruebas físicas y teóricas que describimos a continuación.
La primera fase de la oposición a Policía Nacional viene determinada por las pruebas físicas. Los opositores deben competir entre ellos a través de una serie de ejercicios que, a veces, varían en función del sexo del aspirante, habiendo unas pruebas específicas para hombres y otras para mujeres.
El primer ejercicio consiste en realizar un recorrido definido. Se considera nulo salirse del mismo o derribar las vallas que lo delimitan. Existe la posibilidad de un segundo intento para aquellos cuyo primero ha resultado nulo.
El segundo ejercicio varía para hombres y para mujeres. Los hombres deben realizar un ejercicio de fuerza de tren superior mediante flexiones en barra, en el que solo se permite un único intento. Para conseguir 5 puntos, se realizaran 8 flexiones. Por otro lado, las mujeres se someten a una prueba en la que tienen que mantenerse en la barra de metal, con la barbilla por encima de esta, sin tocar el suelo, con los brazos flexionados y las piernas extendidas, el mayor tiempo posible. Para obtener 5 puntos, tendrán que aguantar la postura entre 44 y 51 segundos.
El tercer ejercicio es similar para hombres y mujeres. Consiste en una prueba de salto. En ella, los opositores tienen que colocarse de perfil junto a una pared y levantar un brazo. La altura a la que llegue el brazo define la marca de inicio. En segunda instancia, el opositor tiene que saltar, con la condición de que, al flexionar las piernas para preparar el salto, no debe despegar los talones del suelo. La distancia entre la primera marca y la segunda (resultante del salto) ha de ser de 53 a 56 cm en hombres para alcanzar 5 puntos, y de 42 a 44 cm para las mujeres.
El cuarto ejercicio consiste en una prueba de velocidad de 2.000 metros para los hombres y de 1.000 metros para las mujeres.
La prueba teórica está compuesta por tres ejercicios diferentes. En primer lugar, el examen tipo test de 100 preguntas sobre el temario de la oposición. Es importante tener en cuenta que las respuestas erróneas penalizan.
La segunda prueba consiste en un ejercicio de idiomas, a elegir entre francés o inglés, a nivel de Bachillerato. Se analiza la comprensión y el conocimiento gramatical del opositor a través de un texto en el idioma elegido y una prueba oral.
La tercera prueba teórica consiste en el desarrollo de un supuesto. El opositor tiene que demostrar su capacidad a la hora de aplicar los conocimientos teóricos a supuestos prácticos habituales en su posible futura profesión.
En esta tercera fase de las oposiciones, los opositores se someten a uno o varios test psicotécnicos en el que se evaluará si su personalidad y aptitudes coinciden con las requeridas para el puesto en cuestión dentro de la Policía Nacional. También se realiza una entrevista personal.
La última fase de la oposición consiste en un reconocimiento médico, que incluye análisis de sangre y orina. Sin embargo, con independencia de este último reconocimiento, a los aspirantes se les puede realizar cualquier tipo prueba médica para detectar un posible consumo de drogas en cualquier momento de la oposición.
En esta prueba voluntaria, el opositor puede subir hasta 2 puntos a través de una prueba de lengua extranjera, a elegir entre inglés y francés, sin posibilidad de repetir el idioma elegido para la prueba de carácter obligatorio.
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24 de septiembre de 2024