Cómo preparar unas oposiciones: consejos prácticos

El proceso de selección que caracteriza unas oposiciones es largo y muy duro. Necesitarás un buen plan de trabajo, paciencia y fe en ti mismo. Aquí tienes algunas pautas para hacer más llevadero el proceso y, finalmente, alcanzar tus objetivos con éxito.

Sigue las siguientes pautas para preparar tus oposiciones. Con tiempo y dedicación todo irá sobre ruedas.

Infórmate sobre cuándo se hacen las convocatorias

Si estás pensando en preparar unas oposiciones, debes saber que en los primeros meses del año el Ministerio de Administraciones Públicas publica en el Boletín Oficial del Estado las Ofertas de Empleo Público que salen para ese año en toda España. Posteriormente, cada Comunidad Autónoma, Provincia o Ayuntamiento lleva a cabo la publicación de las ofertas a los puestos de trabajo concretos de cada territorio. Es necesario que estés atento a estas publicaciones oficiales para informarte de cuándo se llevan a cabo las convocatorias de la oposición a la que quieres presentarte y cuándo expira el plazo de inscripción para la misma.

Elige la mejor oposición

La razón principal por la que se suele opositar es alcanzar un puesto de trabajo estable para toda la vida. Por ello, la primera decisión importante a la hora de involucrarse en este largo y duro proceso de selección es elegir el puesto o la profesión a la que hacerlo.

Hay múltiples posibilidades a las que puedes inscribirte, y es necesario que le dediques un tiempo a pensar cuál es la mejor opción para ti. Date cuenta que vas a preparar unas oposiciones para un puesto indefinido, en el que estarás el resto de tu vida, por lo que plantear cuál es el trabajo que mejor se adapta a tus aptitudes e intereses es muy importante. Sin embargo, además de elegir un puesto o un área de trabajo que te guste, tienes que tener en cuenta si cumples o no con los requisitos que se exponen en las bases de la convocatoria.

Cumple los requisitos de la convocatoria

En primer lugar, debes conocer cuál es el nivel académico que se requiere para el puesto al que quieres opositar. Si no cumples con este requisito tan fundamental, estarás fuera del proceso de selección. Infórmate bien y comprueba que cumples todas las condiciones necesarias expuestas en las bases de la convocatoria. De no hacerlo, no pasarás a la siguiente fase.

Una vez que compruebes que tus estudios son los requeridos para acceder al puesto de trabajo en cuestión, y que posees todos los documentos especificados como necesarios en las bases, debes tener en cuenta una serie de puntos importantes como el número de plazas de la convocatoria, la posibilidad de sumar puntos en la fase de concurso, el tiempo que necesitarás invertir para preparar la oposición o las características del puesto de trabajo.

Adelántate a la convocatoria

Un punto a tu favor es conocer el temario general o habitual correspondiente a tu oposición incluso antes de presentarte. Esto te permitirá ir con cierta ventaja, ya que puedes comenzar a preparar las oposiciones, es decir, las diferentes pruebas teóricas y prácticas, con anticipación y por tu cuenta. Y en caso de que se añada algún tema adicional para el examen de contenidos, podrás organizarte sobre seguro y con un margen de tiempo importante.

Organiza y planifica tu tiempo

Teniendo en cuenta el temario que vas a tener que estudiar y las pruebas físicas a las que te vas a someter, puedes elaborar un plan de estudios que te permita organizar tu tiempo para llegar hasta el final y sin agobios. Lo más importante a la hora de preparar una oposición es una buena organización.

Apúntate a una academia

Las academias son fundamentales para complementar tu trabajo individual. Aunque es cierto que puedes prepararte la oposición por tu cuenta, la mayoría de opositores recomiendan elegir un buen curso en el que formarte. En él, además de repasar el temario y tener más posibilidades de entenderlo, serás consciente de la competitividad que hay entre opositores y podrás compararte con tus compañeros. Además, hay algunas escuelas que también te preparan para las pruebas físicas. Ten en cuenta que la academia no es sustituta del estudio, sino un complemento. Sin estudiar jamás podrás sacar adelante la oposición.

No te rindas

El proceso de selección es largo y muy duro, y como tú hay muchos aspirantes bien formados, responsables y que trabajan con esfuerzo para conseguir el mismo puesto por el que tú luchas. En el caso de que no seas seleccionado, no te apures, y sobre todo no te rindas. Compites con personas que, como tú, dan todo de sí mismas para conseguir el puesto. Vuelve a presentarte en la próxima convocatoria y subsana los errores que hayas podido cometer en la primera oportunidad: falta de tiempo, una mala planificación, los nervios que te han jugado una mala pasada…

Ahora que tienes todas las claves para preparar tu oposición, infórmate sobre las fases por las que tendrás que pasar y las profesiones a las que puedes acceder. Y recuerda, no te rindas, lo único que necesitas es constancia, organización, esfuerzo y, sobre todo, muchas ganas.