El comedor del colegio

La alimentación de los niños en general y en las escuelas en particular es una de las principales preocupaciones de padres y madres. Proporcionar una alimentación equilibrada, controlar las cada vez más frecuentes alergias alimentarias o el aumento de la obesidad infantil y otras enfermedades derivadas de una mala alimentación son cuestiones en las que se ven implicadas tanto las familias como el resto de la comunidad educativa.

Según los datos que ofrece el Ministerio de Educación los comedores escolares dan de comer al 40% de los niños. Un 58% de los centros públicos disponen de este servicio y dentro de la enseñanza privada, los colegios concertados lo ofrecen en un 85% y los no concertados en un 66%.

El tipo de comedor que ofrecen los centros varían desde el clásico comedor donde se cocina en el centro, los que ofertan la llamada línea fría, esto es empresas de catering proporcionan a diario el menú del colegio, o comedores donde se ofrecen menús con productos ecológicos. En nuestro comparador de colegios en España podrás encontrar información sobre el tipo de comedor y el resto de servicios que ofrecen  los colegios más cercanos a tu zona.

¿Cuánto cuesta comer en el cole?

El precio de los menús en los comedores escolares varía de una comunidad a otra. El precio puede llegar a doblarse y suponer al mes 70 euros más dependiendo del sitio donde se viva. Las comunidades donde las familias de los escolares pagan más son Baleares, Cataluña y Aragón y donde menos en Asturias.

Para garantizar que todos los niños que lo necesitan pueden hacer uso del servicio de comedor se crearon las becas de comedor que ayudan a la conciliación entre la escuela y el trabajo de los progenitores. Aquí también hay diferencias. En algunas comunidades como el País Vasco o Andalucía la beca de comedor cubre el 100% del menú. En Madrid solo cubre entre el 21% y el 62% de las bandejas de comida.

Educación y nutrición. Comedores ecológicos

En algunos centros, cada vez más, se pretende dar un paso que vaya más allá de ofrecer un servicio. En estos colegios se apuesta por integrar la alimentación en el proceso educativo. Para ello se elaboran menús cuya base son productos ecológicos y de procedencia local, con lo que se pretende establecer y nutrir las redes locales con productores del entorno. Consideran que de esta forma la alimentación de los niños constituye una actividad económica que beneficia a la comunidad donde viven y van al cole.

Sus defensores consideran que, como ocurre en otros países con modelos educativos ejemplares como Finlandia, la alimentación debe formar parte de la educación ya que se trata de un elemento básico de socialización. La educación en hábitos de alimentación saludables y de producción sostenible como la agroecológica favorecerán que la escuela forme parte de la economía local y los alumnos se sensibilicen en hábitos de consumo ético y responsable con su entorno y con el planeta.

Tanto desde las administraciones como desde diferentes organizaciones civiles del ámbito escolar y del consumo responsable y agroecológico se impulsan iniciativas para mejorar la calidad de los servicios de alimentación de los niños y niñas.